1999
https://dp.la/item/821d3ad919708c025c19d572834a6f04
1973: En Barceloneta, agentes allanaron ilegalmente un vehículo propiedad del militante independentista del Partido Socialista Puertorriqueño, Ángel L. González.
Paralitici, José Ché, “La Represión Contra el Independentismo Puertorriqueño”, página 289
1924: Falleció en la Habana, Cuba quien fue Lola Rodríguez de Tió. Nacida en San German, Puerto Rico el 14 de septiembre de 1843, fue escritora, activista política y autora del himno nacional Puertorriqueño “La Borinqueña”.
Creció en un hogar con un ambiente poético que influenció su formación emocional y de su mamá adquirió el amor por las bellas artes. En su pueblo natal, Lola realizó sus estudios primarios y después su papá, el Lcdo. Sebastián Rodríguez de Astillo, la educó en el hogar. Ella leía libros de historia, moral, religión, viajes y de literatura española. Se fascinó con este último, especialmente de la escritura de Fray Luis de León, quien influenció los primeros versos poéticos que ella escribió. También la influenció poéticamente su amiga, la poetisa Úrsula Cardona de Quiñones como también quien fue su esposo, el periodista y literato Bonocio Tió. Lola fue activa defendiendo los derechos de la mujer, denunciando el gobierno colonial vigente y difundiendo ideales revolucionarios. Para el suceso del Grito de Lares de septiembre 23 de 1868, Lola escribió líricas patrióticas para la danza “La Borinqueña”, escrita el año anterior por el catalán Félix Astol Artés. Esas líricas se convirtieron en el himno nacional Puertorriqueño. En 1876, Lola publicó su primer libro de poemas, “Mis Cantares”, y al año posterior junto a su esposo se mudó a Venezuela escapando la persecución que sufrían por su activismo político. Allí conoció a Eugenio María de Hostos. Un año más tarde regresaron a P.R., estableciéndose en Mayagüez y fundaron la revista “La Almojábana”, pero en 1887 regresaron a Venezuela. También en ese mismo año, Lola y su esposo se mudaron a la Habana, Cuba. En 1889, en la “era de los compontes”, Lola cooperó por la excarcelación de los autonomistas presos en las celdas del castillo El Morro y el fuerte San Cristóbal. Por esto, tuvo que abandonar P.R. por la persecución contra ella que generó. Se estableció otra vez en Cuba. Allí, en 1893, Lola escribió su tercer libro “Mi Libro de Cuba” donde aparece el verso famoso:
“Cuba y Puerto Rico son
de un pájaro las dos alas,
reciben flores y balas
en un mismo corazón".
En Cuba también simpatizó con José Martí, quien luchaba por la independencia de Cuba y por lo que fue expulsada a la Ciudad de Nueva York en 1895. Una vez allí, de inmediato ingresó al Partido Revolucionario Cubano. Lola regresó a Cuba en 1899. Allí, fue electa miembro de la Academia de Artes y Letras y de la Sociedad de Escritores y Artistas. En La Habana se desempeñó como Inspectora de Enseñanza Privada. Lola visitó P.R. por última vez en 1919, para ser honrada en el Ateneo Puertorriqueño y donde recitó su poema “Canto a Puerto Rico”. Por el resto de su vida, Lola se quedó viviendo en Cuba donde era considerada por los cubanos como una compatriota más. Hasta el día de hoy allí aún descansan sus restos.
1915: Nació en Arroyo, Puerto Rico, quien fuera el Lcdo. Roberto Beascoechea Lota, abogado y educador.
Vivió varios años en la República Dominicana con su familia y volvió a P.R., estableciéndose en San Juan. Estudió en la Academia Católica, en las universidades de P.R. y Chicago, donde obtuvo un grado en Ciencias Políticas y una licenciatura de la Escuela de Derecho de la U.P.R.. En su juventud, Beascoechea formó parte de la Asociación del Santo Nombre y en el Centro Universitario Católico. Fue profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de P.R. y por su activismo en el nacionalismo puertorriqueño, fue suspendido en 1948. En ese mismo año Beascoechea Lota se fue a España para ingresar al seminario de Vocaciones Tardías de Santiago en Salamanca. Regresó a P.R. en 1950 y por las insurrecciones nacionalistas del mismo año fue encarcelado varios días. Posteriormente se dedicó a la divulgación de la historia y el culto a Nuestra Señora de la Providencia. “Participó en la restauración de las solemnidades del centenario de la inauguración del culto público en la Catedral.” En la prensa de P.R., Beascoechea Lota escribió artículos sobre la historia de la iglesia católica en P.R., destacándose donde dio a conocer la presencia en 1597 de los Beatos jesuitas Carlos de Spinola y Jerónimo de Angelis. Creó un calendario litúrgico de las festividades principales de la tradición puertorriqueña que incluían las memorias de los santos y beatos que tuvieron relación con P.R.. Beascoechea Lota fue uno de los fundadores del Partido Independentista Puertorriqueno en 1946, específicamente como miembro del comité a cargo del programa cultural de dicho partido. En 1954, formó una cruzada de oraciones por P.R. cuyos miembros se reunían en las fechas del calendario mencionado en alguna iglesia para el rezo del S.S. Rosario. En 1956, el Dr. Ricardo Alegría lo llamó para que formase parte de su consejo de asesores en el Instituto de Cultura Puertorriqueña. Desde allí, como historiador, Beascoechea Lota contribuyó a la difusión del ideario del instituto cultural y se retiró como el director de su biblioteca nacional. También fue miembro de la Junta de Gobierno del Ateneo Puertorriqueño y de la Academia Puertorriqueña de la Historia. Beascoechea Lota dejó una abundante producción literaria inédita sobre la historia, religiosidad, política, identidad y moral puertorriqueña, genealogía y heráldica. La mayoría de los escudos de los pueblos de P.R. fueron diseñados por Beascoechea Lota. Falleció en el 2004.
http://www.elvisitante.biz/visitante-web/2005/evwebed0805/san_juan.pdf